Todo el mundo sabe lo importante que es beber agua, pero no todo el mundo entiende bien. El proceso de ingesta de líquidos no es complicado. Sin embargo, muchas personas beben muy poco. De hecho, sabemos que solo siete de cada diez adultos creen que beben lo suficiente todos los días para cubrir su necesidad de líquidos.

✅ El estrés provoca gargantas secas

Mucha gente sabe lo importante que es beber lo suficiente, pero no saben cómo satisfacer sus necesidades mínimas. Hay muchas razones para esto. Una de los más importantes: el estrés. Aquellos que están bajo constante presión privada y profesional, a menudo se olvidan de ingerir un vaso de agua. 

Hablando de requisitos mínimos: los adultos sanos deben consumir de dos a tres litros de líquido por día. Una buena pauta es 35 mililitros por kilogramo de peso corporal, para bebés y niños es aún más.

✅ La comida también proporciona agua.

El cuerpo puede producir alrededor de 300 mililitros durante sus procesos metabólicos y obtiene alrededor de un litro de agua de los alimentos sólidos. Las manzanas, las verduras y las patatas, por ejemplo, contienen alrededor del 70 % de agua y los pepinos, incluso el 95%. La cantidad restante de líquido, es decir, alrededor de 1,5 litros, debe absorberse a través de bebidas.

Beber muy poco líquido es malo para la salud. Los riñones por ejemplo, son responsables de eliminar los productos de desecho del cuerpo y necesitan líquido para hacer esto. Otras consecuencias de la falta de ingesta de líquidos es que la sangre se vuelve más viscosa y, por lo tanto, ejerce presión sobre el sistema cardiovascular, y la digestión se vuelve lenta.

✅ Necesidad especial de líquidos.

En algunas situaciones, la necesidad de líquido es aún mayor. En un clima cálido, trabajo físico extenuante, deportes, fiebre, vómitos y diarrea, el cuerpo pierde más agua. En este caso, debe beber más de las cantidades especificadas.

✅ ¿No tienes suficiente sed? Bebe de acuerdo al plan.

Cualquiera que tenga dificultades para beber sus 1,5 litros de líquido al día debe fijarse un «horario de bebida». Por ejemplo, la cantidad de bebida recomendada podría lograrse de la siguiente manera:

• Mañana: 1 a 2 tazas de café o té
• Media mañana: 1 vaso de jugo, leche o una infusión.
• Mediodía: 1 taza de sopa o caldo; 1 vaso de agua mineral o jugo de fruta.
• Tarde: 1 taza de café, 1 vaso de agua
• Por la noche: 1 a 2 tazas de té/infusión; 1 vaso de agua

✅ Una aplicación puede ser tu amiga

Por supuesto, es aún más fácil con un smartphone. Hay una serie de aplicaciones que te recuerdan cuándo es hora de volver a tomar un vaso de agua. Con los términos de búsqueda «agua», «beber» y «recordar» obtienes varios resultados. 

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