Los medios impresos se están volviendo menos importantes. Al mismo tiempo, el “espacio editorial” se está reduciendo: la edición de fin de semana de un periódico diario, que en el pasado a menudo tenía que llenar un sábado por la tarde, ahora es más delgada y de menor tamaño. Es comprensible que los responsables de la comunicación estén buscando alternativas en línea. En particular, los llamados influencers entran en foco.
Los grandes proveedores de herramientas de relaciones públicas reaccionan a esto e integran cada vez más los datos de influencia además de los contactos editoriales.
✅ Cooperación – expresamente deseada
Una ventaja particular es que los influenciadores enumerados, como los medios y los editores, han aceptado ser incluidos en la base de datos: están indicando que están dispuestos a cooperar o incluso están expresamente interesados en ellos, y no rechazarán bruscamente las solicitudes correspondientes.
✅ Las agencias y las empresas deberían hacerse estas preguntas:
- ¿Qué aportación necesita el influencer para una historia que “cautive” a su grupo objetivo y cómo debe prepararse el contenido?
- ¿Se han tenido en cuenta los canales que utiliza?
- ¿De qué otra forma podría apoyarse al influencer para desarrollar la historia?
Eso no significa nada más que eso, para un influencer, mucho más que con los medios clásicos, depende de la exclusividad “a medida”.